Ya llegaron los Reyes Majos

Lo último que comenté en el blog es el pedazo de shock provocado al llegar a São Paulo después de unos días en una ciudad tan europea como Buenos Aires...

Qué le vamos a hacer, las penas en esta ciudad duran unos 2 minutos, qué fuerte, qué semana!!! Dos becarios han tenido visita de España, con lo que había que salir de paseo para que vieran la ciudad tanto de día como de noche, para que nos vamos a engañar. Así que dura semana: de miércoles a domingo de pajareo continuo y continuado. Encima las dos chicas no podían ser más animadas: Inés y Nuria.

Por cierto, la foto en la que aparezco sola tiene su explicación. La casa de los chicos, como todas las demás estaban completamente vacías... ahora tienen montones de posters de la oficina, todos con cosas de España, claro!! pero no se si se aprecia la tortilla de patata, con un tomate... tremendo!! que campaña de promoción!

El sábado sabadete después de haberla liado mucho los días anteriores, estábamos cansados con lo que cenamos en mi casa y a celebrar los Reyes Magos, haciendo el juego del rouba-rouba, una versión libre del famoso amigo invisible, que gracias a las indicaciones de mi Endikaka preferido pudimos celebrar. Divertido, muy divertido. Cenita, unas copitas, el jueguecillo y muchas risas. Por cierto, cenaron con nosotros Giuliano y Luciana, lo que me hizo mucha ilusión, dar el toque brasileiro a la colonia de españoles...

Ya el día 6, me levante a eso de la 13, recogí el desaguisado de la noche anterior, y un poco de pena por eso de estar solita, sin chocolate, sin rosco, ainnnnnn. De añadidura, miro el árbol, y los regalos de nuestros compañeros ya no estaban... pero lo que si estaban eran nuestras sandalias brillantes bajo el árbol sin ningún regalito... snif, snif, que pena más grande!!! jaja, solita el día de Reyes y sin regalos (que le vamos a hacer, un poco materialista sí que voy a ser). Peeeero falsa alarma, después de la ducha, ahí estaban nuestros regalos, qué ilusión, pero qué alegría!!!

Regalitos: un botijo (sí como suena, para tener el agua fresca en mi habitación) de mis compis de casa, 200 gramos de jamón del amigo invisible y una postal muy bonita.

La historia de la postal no tiene desperdicio, la chica que ahora arruma la oficina es encantadora, y charlo bastante con ella. Pues la muchacha me ha traído un montón de fotos de sus sobrinas para que las viera, y después me ha dedicado una postalita. Que ilusión!!!! Esto es maravilloso.
En fin, ya se han pasado las fiestas navideñas... ahora toca recoger el árbol y comenzar de verdad con los propósitos de año nuevo, muchos de ellos intactos desde el año pasado por estas fechas...