Una de buceo en Arroial do Cabo (14 a 19 de noviembre)

Bueno, pues el feriado del que hablaba en la entrada anterior lo he pasado en Arroial do Cabo, un pueblo costero a 3 horas al norte de Rio de Janeiro. Salimos de São Paulo a las 23:50 del miércoles (Landeta, Amaia, Cris y yo) llegamos más que puntuales a las 5:40 a Rio y de ahí 3 horitas de espera para coger el autobús a destino durante 3 horas más… todo bien. Llegamos a las 12 del mediodía. Suco y salgadinho reparadores, bikini, pareo y a la playa!!!
El jueves puede resumirse en día de playa y chiringuito playero, cervecitas y gambas a diestro y siniestro. A eso de las 20 de la noche yo ya estaba en la cama… porque como he dicho antes… las anginas me estaban matando a pesar del antibiótico y los antinflamatorios…



Milagrosamente el viernes me levanté como una rosa, aunque el tiempo no acompañaba, así que decidimos hacer excursión a Búzios, pueblo súper “chicki” a 45 minutos. Súper chulo, súper tranquilo, súper bien: paseito, playa, puestitos, zumo, papeo... día tranquilo en un sitio chulísimo.

Ya llega lo más emocionante. Curso de buceo. Siii, he sacado el carnet para poder bucear hasta 18 metros de profundidad. Las clases teóricas eran un poco de coña, porque entre el lenguaje técnico y el portugués, yo me mantuve en el limbo una buena parte de las horas de clase, pero bueno, creo (o más bien espero) haberme enterado de las cosas más importantes.

Las inmersiones… acojonantes. No tengo palabras… súper bien. Primero en piscina a practicar respiración, máscara, quitar y poner respirador…. Todo bien, aunque un frío increíble después de dos horas a remojo (con traje y todo, sí congelada). Por la tarde un par de inmersiones en el mar. Súper bien, visibilidad perfecta, un montón de pececillos, y una tortuga!!!!
El domingo más inmersiones, aunque la visibilidad era mucho peor, y ya no vi tantos pececillos. En cualquier caso, nos estaban probando para ver si nos daban el título o no… para acabar un examen teórico, más o menos fácil. Siiii, ya tengo titulo y ya voy a poder bucear cuando quiera, aquí es bastante barato y dicen que hay sitios muy bueno donde bucear…. Me ha encantado!!!

El domingo llegamos a Rio a las 20 más o menos, y fuimos a “La casa rosa” un bar de samba en directo muuuy chulo. Mucho cansancio pero nada que no mate una buena caipirinha. A las 23:50 bús a São Paulo. Puntuales a las 6 en casa, a dormir y snif, snif a las 9 a currar, vuelta al amargo lunes.