Peculiaridades de la ciudad

Esta es una sección para esas cosas que llaman poderosamente la atención en la ciudad:

1. Plano de autobús. No existe o no lo hemos descubierto, ni yo, ni otros españoles que llevan aquí mil años. Es decir, en las marquesinas, no están los números de los buses y sus recorridos, y qué decir del típico . Es un infierno. Cojo los autobuses a la buenadedios… falando mi portuñol chungo para conseguir llevar a mi destino. Por cierto, en esta ciudad montar en autobús es un deporte de riesgo.

2. Champú y gel. Por alguna extraña razón, los supermercado tienen todos los productos de pelo que te puedas imaginar, de todas las formas, tamaños, tipos de pelo, todo. Peeeero, los botes de gel… en caso de que haya, hay cuatro y tamaño gimnasio.

3. No hay fregonas. Perdón, rebuscando mucho, puedes comprarte una por casi 20€ (para ser sincera no sé cuanto cuesta en España, pero se me hace caro).

4. No se puede echar papel al baño. Ya lo había visto en otros países pero es una lata terrible y siempre se me olvida. Y me preocupa, porque en Guatemala, viví un atascamiento con la correspondiente inundación de la habitación (verdad Bego?).

5. Aceras. Sí, si como suena… algo tan básico… o por lo menos algo en lo que nunca me había fijado antes. Pues toma ya. Aquí son propiedad de cada portal o casa, con lo que tienen la obligación de mantenerlo. Jajajajaja, si por cada tropezón me dan 1 real, dejaría de trabajar para siempre. Es imposible andar.


6. Persianas. No existen en la mayoría de las casas. Aquí se lleva una especie de ventanas de metal (sin cristal, o solo con una parte de cristal) y el metal… tiene agujeros (como si se tratara de una persiana de metal permanentemente bajada pero con sus agujeritos). Con lo que no me extraña que la gente se queje de frio a nada que la temperatura baja a 15º.

7. En muchas compras, como en lanchonetes, kilos, etc. hay varias ventanillas para atenderte. La primera te escribe en un cacho de papel cuanto es, y la siguiente ventanilla te lo cobra. Es una especie de trabajo en cadena…. El mejor ejemplo creo que son los bares, cuando entras te dan un papelote con tu nombre… entonces, cada vez que pides algo, te lo apuntan en ese papelote, y no lo pagas con lo que efectivamente se ahorran muchas colas en barra. Peeeeero luego las colas para salir son interminables, porque hay otro señor que te cobra… y para no variar, siempre salimos cuando nos cierran el garito, con lo que los agobios y colas… no comments.

Continuara....