Después de las peleas conyugales con Cris, necesitábamos una reconciliación, así que, que mejor plan que una cenita romántica en casa. Trabajando hasta las 19 (a cosa hecha, sabía que el viernes con resaca poco iba a producir), atasco para volver a casa, siesta en el autobús repletito de malandros y un gran mosqueo a cuenta de la gran ciudad.
A pesar de esos pequeños detalles sin importancia (ejem) cenamos estupendamente: vinito argentino, una lata de mejillones, una lata de pulpo y un bote de tofu (o era aire?). Con los ánimos más caldeados, fiesta en el Morrison (Rua Inacio Pereira da Rocha con Mourato Coelho), música en directo, compañía de lujo (Cris, Ale, Juan, Elene e Isra) y de nuevo muchas ganas.
Me lo pasé muuuy bien. Para no variar, viernes de sufrimiento. Un pelín de resaca, de sueño… pero las horas pasan, pasaron… y corriendo a casa a echar una gran siesta, sí, grande grande: me he despertado a las 23,15!!! Así que ahora es la una de la mañana y estoy hiperactiva!!!!
En resumen, otra semana repleta de actividades y eventos. Comprar el regalo de Elena, cumple sorpresa, evento gastronómico español (de donde pensabais que habíamos sacado la cena romántica?) y día dos namorados.
En resumen, otra semana repleta de actividades y eventos. Comprar el regalo de Elena, cumple sorpresa, evento gastronómico español (de donde pensabais que habíamos sacado la cena romántica?) y día dos namorados.
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